viernes, 16 de diciembre de 2011

Madrid es mucho Madrid...


No se por donde empezar a contároslo... Bueno, quizás la estación de Atocha sea un buen comienzo.
Está increíble de grande y bonita. Dentro han instalado cafeterías, tiendas...Podéis encontrar de todo.
El hotel lo elegimos mi hija y yo en la Gran Vía, porque entre otras cosas, es uno de los lugares por donde siempre me he movido.
El primer día  salimos a encontrarnos con la Puerta del sol y la Plaza Mayor. Era casi imposible andar ibas como movida por la marea de gente. El ambiente increíble.
Hacía años que no iba y parecía que solo había faltado un par de días. Dentro del poco tiempo que disponíamos intentamos saturarnos de todo.
Y cuando digo de todo intentamos, ver alguna exposición, edificios, museos.
Pero también picoteamos por todos los bares más típicos  de Madrid.
No nos faltó el caldito en Lhardy, Las famosas patatas a la brava, el vino del Abuelo, y montones de sitios estupendos, Como la casa de la cebolla. Donde mi hija saca una foto a los montaditos.
Encontrar un hueco era una labor casi imposible, pero al final lo podíamos conseguir. Es lo bueno de no tener un horario que cumplir.
Está precioso. Yo personalmente lo necesitaba para sentir la Navidad.
Y lo mejor de todo es que pudimos encontrarnos con unas sobrinas que hacía tiempo que no veía.
No es mi intención alargaros los dientes pero como dije al principio "Madrid es mucho Madrid"
Sobre todo cuando has pasado tu juventud, y te trae tantos recuerdos.
Lo peor fue la vuelta el despedirme de personas y lugares. Esa sensación de separación no deseada, que me hizo que se cargaran mis ojos como pequeñas nubes, que dejan escapar una suave lluvia de lágrimas. en las que se puede entrever una palabra "Volveré"

No hay comentarios: